VISITANTES: 42
Obra en acrílico sobre madera "Cerca de Cundiamor" (bajo el arco de metal) 2015 MIENTRAS TODO DUERME |
Mientras todo duerme,
el sereno se acomoda en mi ser y me hiela,
me empequeñece de mil formas
como la niebla de la emoción royendo
mi frente.
Mas todo sigue igual y luego continúo
el ritmo inquieto de mi viaje y no me acojo
a la nada o a lo perdido.
Jamás dormiré despierta en la cruzada
con los jinetes o con una lanza de acero
en la mano para salvarme.
Nunca me aclimato al silencio o al frialdad
de la muerte, a la apatía de los días raspando
el silente trinar de las letras, avisándome.
Y todo está en el curso de los dioses,
en la función de luminosidad, en el sereno
abrir y cerrar del misterio en que se cuela
la memoria.
Mientras todo duerme,
toda la quietud se lanza hacia la eternidad
que calla por siempre su permanencia
o su inmortalidad fiada hasta que alcance,
"La Bella"
Y ALGÚN DÍA
de las cosas,
"La Bella"
Lápiz de color y pluma de N.C.
Y después, ya cuando mi orilla deje de ser rivera,
cuando la intemperie vuelva a ser noche,
¿Hacia dónde mi remo me llevará en alegría,
a que horizonte iré, hacia que distancia o cielo¿Hacia dónde mi remo me llevará en alegría,
me veré correspondida?
¿Qué cobijo protegerá mi voz, desde que mundo
me mirará la aurora, de pie, ahora,
en mi intranquilidad de rechazo a toda costa,
en mi intranquilidad de rechazo a toda costa,
y por qué?
Escucharé mis pasos desde la penumbra,
de diferente estela, de distinto color, de niebla
su recorrido de nubes y olas, de salpique azul
y olor.
Y algún día, después, y cuando los machetazos
sean más leves, menos aceptados por mí,
rebotados por mi orgullo, botados a la basura
SOBRE MIS CUADROS
Aprendo a desmontar
mis cuadros,
aquellos que no tienen
sentido,
aquellos que no dicen
la esencia de mi ser.
Los miro con esa pena
descalza, honda, breve,
con esa sensación
rebelde y obligada
que se aplica a la pared.
Y aprendo a despojarme de las cosas,
del doloroso desprecio
caído en mis invalideces
y mis hombros.
Veo la venida del verano
y lo distingo todo nuevo
y, me parece incierto,
el sol y su venida,
sin lluvia y sin lamento
muriendo sobre mí.
Aprendo a desmantelar
mis cuadros,
esos que están sin título
sobre la pared callada
de mis versos.
noris capin